20.7.19

Sacó su cuchillo para defender a un compañero en Malvinas y el soldado inglés, en vez de disparar, lo abrazó y le dijo: "The war is over"

El cabo Roberto Baruzzo en Malvinas, junto a sus compañeros
cuando finalizó la guerra y quedó prisionero de los ingleses en Fitz Roy

El cabo Roberto Baruzzo quedó solo con su compañero agonizante, a quien protegió contra decenas de ingleses. Con varias heridas encima batalló hasta que se agotaron sus municiones y sacó su cuchillo. El comandante británico, admirado por su valor, decidió perdonarle la vida basándose en un código de honor

Largo y ancho campo de nieve. Desde el cielo se ve todo blanco. Todo blanco salvo por una mancha negra pequeña que se va expandiendo conforme brota la sangre del cuello de Echeverría. No está solo, un cabo de 22 años lo abraza y le pide que resista.

El cuerpo de Echeverría recibió cinco disparos y su sangre, que se ve negra al contacto con la nieve, desespera a su compañero. Ya no tienen municiones para defenderse, solo le queda un cuchillo. Un soldado inglés se deja ver, fusil en alto, y comienza a aproximarse. El cabo desenfunda el arma y se pone en posición de pelea. No piensa entregarse. El inglés se acerca un poco más y le toca el brazo con el cañón del fusil. "War is over", le dice, "war is over". Y lo abraza.

Es una madrugada de junio de 1982 y están en las Islas Malvinas, más precisamente en Monte Kent. El nombre del cabo es Roberto Bacilio Baruzzo. Hoy tiene 59 años y vive en Corrientes, provincia de la que es oriundo (más precisamente, del pueblo de Riachuelo). Se casó y tiene dos hijas. Una de ellas se llama Malvina Soledad, como las islas, y la otra Mariana Noemí.

Su historia es una de las tantas historias heroicas de Malvinas, con una salvedad: Baruzzo es uno de los pocos combatientes en recibir la Cruz al Heroico Valor en Combate, máxima condecoración a la que puede aspirar un soldado argentino, junto al Sargento Primero Mateo Sbert, caído en el combate de Top Malo House; el Teniente primero Jorge Vizoso Posse, el Subteniente Juan José Gómez Centurión; el soldado conscripto clase 1962 Oscar Poltronieri; Teniente Ernesto Emilio Espinosa y el Teniente Roberto Estévez.

El reconocimiento a Baruzzo no queda ahí: en su Riachuelo natal tiene una calle con su nombre, y en la ciudad de Corrientes, donde vive, un busto. Sin embargo, su historia sigue siendo desconocida por muchos. No le gusta hablar ni participar demasiado en programas de televisión, aunque alguna vez ha contado su derrotero a Nicolás Kasanzew o en vivo a Alejandro Fantino en Animales Sueltos.

Derrotero que termina (¿termina alguna vez?) en la nieve manchada de negro aquella noche de mediados de junio del '82.

Vamos a esas fechas. Baruzzo está apostado en Monte Kent protegiendo unos helicópteros a la espera de ser trasladado a Darwin. De pronto, un ataque aéreo inglés los sorprende y la esquirla de una bomba que le cae cerca provoca que un alambre le atraviese el brazo. Un capitán da la orden de cargar los soldados en los helicópteros y llevarlos a Darwin, pero le pide a Baruzzo que se quede ahí esperando un enfermero. En su estado, con el brazo destruido, era imposible que mantuviera un combate.

Se repliega y llega hasta Monte Harriet junto a otro regimiento que se se dirige hacia ahí. Tiene el brazo cada vez más hinchado, pero resiste.

Cuando llegan a Monte Harriet, los ingleses atacan otra vez. Los soldados corren para todos lados y él los sigue. El cielo se prende y apaga con los destellos de las municiones. Se genera un descontrol. En medio de la retirada, algunos soldados caen al suelo, Baruzzo entre ellos. Un camarada le pisa el brazo y le revienta la herida. El cabo se levanta como puede y va hasta la enfermería, necesita parar el dolor de algún modo. No hay nadie, ningún médico, pero encuentra un frasco de penicilina en polvo. Sin saber cómo se usa (se suele inyectar mezclado con una solución), se tira ese polvo directamente sobre la herida. Arde, al principio, pero con los minutos siente que comienza a sanar (más tarde, volverá a tratarse la herida con azúcar porque en algún lugar leyó que eso servía).

Cesa el ataque, por unas horas. Esa misma noche comienzan nuevamente los bombardeos. Los soldados, protegidos en las trincheras, comienzan a salir a la intemperie conforme las bombas derrumban sus pozos.

En medio del ataque, Baruzzo ve a un amigo herido. Es Jorge Echeverría, su superior. Tiene varios tiros en el cuerpo y está rodeado de soldados ingleses, que le disparan desde todos los ángulos.

Baruzzo derriba a un soldado inglés y le roba su fusil -mejor que el propio- y su visor nocturno. Con esos dos elementos se dispone a proteger a su camarada. Se pone el visor y es entonces cuando siente miedo por primera vez. En medio de la noche más cerrada, en medio de la oscuridad más negra que vio nunca, descubre que con el visor se ve todo a la perfección, y distingue a los soldados ingleses de los argentinos, que caen uno atrás del otro. "Así nos ven", piensa, y se da cuenta de la desventaja.

Levanta entonces el fusil y comienza a cubrir a Echeverría, que para ese entonces ya tiene cinco impactos de bala. "Agarré y le maté a uno primero", cuenta Baruzzo. "Después apareció otro y le maté al otro. Y de golpe del otro lado me empiezan a tirar con municiones trazantes… no me mataron porque tengo un Dios aparte. Ahí vi que Jorge le dispara al que me ataca y lo pega. Entonces yo aprovecho y salto y agarro de la chaquetilla a Jorge y lo llevo atrás de una piedra. Pero el problema es que éramos dos, y la piedra para dos no era…".

Su compañero intenta pararse pero no lo logra. Le dice que no siente el cuerpo. Baruzzo lo apoya contra una piedra y con su cuchillo le abre el pantalón para curarlo. "Tenía todo negro", recuerda el entonces Cabo. "Ahí vi los orificios de los tiros. Le saqué el cordón de la chaquetilla, le até la pierna, le hice el primer torniquete y lo empecé a arrastrar de la chaqueta".
Después siguió defendiéndose de las balacera inglesa y derribando enemigos con el Fal 762 del que se había apropiado

El cabo de 22 años llegó a Malvinas con el
Regimiento 12 de Infantería de Mercedes
Estaban rodeados de neblina, se veía poco. Baruzzo ya no sabía si era la bruma natural de la isla o una humareda formada por los tiros. Sin importarle, avanzó con su compañero a cuestas a través de la nieve. En un momento se les cruza una silueta que empieza a disparar. "Las balas se me vinieron encima, pero las ligó Jorge… Entonces yo disparé, lo puse fuera de combate a ese tipo, y ahí Jorge se desplomó", recuerda Baruzzo.

Le pidió agua, Baruzzo sacó su botella de whisky y le convidó, como quien le ofrece el último trago a alguien que se despide. "Se moría. Estaba hecho un colador. Pero tenía una paz… Tenía todo lo que a mí me faltaba", recuerda Baruzzo.

Echeverría le dice que ya está, que lo deje morir. "Por favor, abandoname, escapate vos que podés", le pide. Baruzzo no sabe si va a poder escaparse, pero sí sabe que si lo abandona y logra salir vivo, no se lo va a perdonar nunca. "Era de una cobardía total", dice.

Echeverría insiste: lo agarra de la chaqueta y le dice: "Robertito, dejame, te lo pido por favor". Baruzzo se quiebra. Pone su cabeza en el pecho de su compañero y se echa a llorar desconsoladamente, un llanto sonoro, un llanto de joven militar de 22 años que acaba de matar y ve morir a su amigo y sabe que también morirá él. Un llanto largo y entregado, desprovisto ya de toda melancolía y esperanza. Desprovisto de miedo, miedo jamás.

La mancha de sangre se empieza a expandir sobre la nieve blanca. "Ese hombre me transmitía paz. Era mi jefe, el jefe que yo siempre soñé tener. Si me mataban iba a ser una muerte realmente digna", rememora.

Están solos ya, nadie alrededor queda en pie. Parado en medio de la nada y cubierto de lágrimas, se queda sin municiones. Se pone el visor nocturno y comienza a mirar cómo a su alrededor las figuras inglesas se desplazan en grupos hasta rodearlos. Pirañas en medio de una isla dispuestas a terminar con ellos.

"Yo sabía que el modo de avanzar de los ingleses era por escalones, una formación atrás de otra cubriéndose mutuamente. Lo que no sabía era cuántos escalones había", recuerda.

Es en ese momento cuando Baruzzo asume que lo van a matar. Saca su cuchillo y se pone en señal de pelea, todavía llorando. "Vamos a ver cómo morimos", se dice, "vamos a ver cómo morimos". Y levanta el cuchillo.

Entonces le aparece casi encima la silueta del primer inglés. Baruzzo se queda duro, en blanco. El hombre se acerca un poco más. También tiene visor nocturno y está armado. En medio de esa oscuridad, los dos hombres se están viendo: son una figura verde claro proyectada en una pantalla pequeña delante de los ojos, como si fuera un juego de realidad virtual.

A Baruzzo le parece extraño que no lo hayan liquidado todavía, un tiro a distancia y listo, no se requería de mucho. Sin embargo… el inglés se acerca cada vez más hasta ponerse al lado del argentino que tiene el cuchillo en la mano.

Lo primero que sintió fue el cañón del fusil sobre el brazo. Dos pequeños golpes indicándole que se desarme. Soltó el cuchillo y un segundo después se dejaron ver cuatro o cinco ingleses más. El primero de ellos baja su arma y lo pronuncia: "War is over". La guerra terminó. Se acerca al argentino y lo abraza.

"Sigue siendo mi enemigo y lo van a ser siempre. Yo no me abrazo con ningún inglés, no quiero saber nada con ellos. Pero en ese abrazo sentí como si fuera mi padre, y me eché a llorar en sus brazos… Así es, apretado contra él me eché a llorar", recuerda Baruzzo.

A su lado, su compañero se estaba muriendo desangrado.

El inglés le dijo "Ok Argentino", tomó su cuchillo ensangrentado, lo limpió en su pantalón, y le habló a sus compañeros. Todos ellos se acercaron y palmearon a Baruzzo. Le habían perdonado la vida.

Jorge Echeverría no tenía ninguna posibilidad de salir vivo de ahí. Aún así, lo subieron a un helicóptero británico y lo mandaron al buque hospital británico HMS Uganda. Lo atendieron y le salvaron la vida. Hoy vive con su mujer y sus dos hijas en Tucumán. Se considera un hermano de camarada, a quien le debe la vida.

Al día siguiente de esa noche lo ingleses le pidieron al cabo Roberto Bacilio Baruzzo que recogiera los cuerpos de los muertos que él mismo había matado. Eran muchos. Mientras lo hacía, se le acercó otro inglés y le dijo: "Tuviste suerte, nuestro jefe maneja un código de honor: al que se lo encuentra en el campo enemigo combatiendo por un camarada se le perdona la vida".

Cuando se terminó esta nota, Roberto Baruzzo realizó un único pedido, sin condicionamientos, y con el tono cálido y humilde típico de los correntinos: "Más que mis misiones, me gustaría que se resalte el valor y el heroísmo de mis soldados que murieron en Malvinas. También quiero que se cuente el honor y la valentía de Jorge Agustín Echeverría, el oficial del Regimiento Cuatro. Él fue para mi un ejemplo en pleno combate, porque yo le hice los primeros auxilios en medio de millones de balas trazantes, y gracias a Dios pudo salvar su vida. Lo que yo hice fue solo aportar mi granito de arena, porque así lo quiso Dios y la patria".

Joaquín Sánchez Mariño @Joaquinsmarino | Infobae | 20 de julio de 2019.

15.7.18

¿Qué nos dejó la Revolución francesa?



No fue la única, ni la primera, ni la última.


 Ya habían ejecutado a un Rey (Carlos I de Inglaterra) y habían desplazado a sin número de monarcas, pero la revolución de 1789 se ha convertido en un hito histórico, paradigma de golpe de estado, un arquetipo de las conductas de sus partícipes que se repitieron en las colonias españolas, en Haití, en Rusia, en Cuba, Angola y en cada lugar en que un movimiento popular pretendía desplazar un régimen autocrático. Cuando esto acontece surgen jacobinos y girondinos, fanáticos y moderados, intelectuales que preceden en años al movimiento y ofrecen letra para justificar sus aciertos… y sus excesos. En toda revolución y bajo distintas formas, se oculta un Robespierre y un Danton, un Marat y un Saint Just aunque no todos corran la misma suerte. Algunos subsistirán y, a su tiempo, podrán convertirse en héroes o tiranos. A otros solo les espera una muerte violenta.

 Hay quienes la historia los convertirá en prohombres, otros quedarán sepultados en la ignominia.

 Los acontecimientos que llevaron a estos reclamos populares pueden sintetizarse en:

1) El apoyo del gobierno francés a la Revolución americana y el agotamiento de sus arcas, que llevó a un aumento en la presión impositiva (basada en una tercerización de la recaudación).
2) El mal tiempo y las malas cosechas (ver Clima y Política) con su secuela de ruina económica y hambre.
3) La perseverancia del gobierno francés de mantener la misma presión impositiva y sus prerrogativas en la Convención Nacional (la aristocracia y el clero, es decir las partes más ricas de la población, gozaban de excepción impositiva).
4) Las dudas al momento de accionar ante grupos que actuaban con vehemencia.

 Curiosamente, la monarquía había apoyado las ideas de los revolucionarios americanos, pero se había negado a concederle los mismos poderes a la burguesía francesa.

 La Revolución francesa, a no dudarlo, fue el reclamo de una burguesía que aprovechó el descontento popular a fin de promover sus ideas. Ninguno de sus líderes era de extracción social baja, todos eran personajes educados, como Robespierre, Danton y Marat (los dos primeros, abogados y el tercero médico) y aun nobles, como Mirabeau y Condorcet. Pasada la efervescencia inicial, este grupo (o mejor dicho, los supérstites) se encargaron de hacer una nueva oligarquía bajo el Imperio de Napoleón.

 La tan comentada toma de la Bastilla fue un acto más simbólico que justiciero. Solo seis presos que se alojaban en ella, y no podían llamarse políticos. Hasta el mismo ministro Necker había solicitado su destrucción.

 Obviamente, el legado más importante de la Revolución fue la Declaración de los Derechos del Hombre, que inspiraron la célebre tríada de libertad, igualdad y fraternidad, principios que no siempre los revolucionarios tuvieron presente, más cuando debieron recurrir al Terror para imponerse. Es más, esta declaración no fue una novedad, pues existían numerosos antecedentes. Como los Concilios de Toledo, la Carta Magna Leonesa (1188), la Carta Magna inglesa (1215), el Habeas Corpus (1679) y The Bill of Rights (1689). El acta de declaración de Independencia (1776) y la Constitución americana (1787), son sus antecedentes directos, por lo que podemos decir que la declaración francesa solo fue la imitación y difusión. Es imprescindible señalar que esta declaración de 1789 fue anulada en 1794 (Loi du 22 prairial) donde se introduce el concepto de Tribunal Revolucionario que tiene potestad de suprimir estos derechos para aplicar las políticas del Terror, de modo tal que dicha declaración terminó siendo una parodia, una burla para aquellos que la votaron y finalizaron sus días siendo víctimas de la mecánica revolucionaria.

 Si bien en los derechos se declara la libertad de culto, los revolucionarios adoptaron al principio un papel anticristiano (pose ideal para hacerse de los cuantiosos bienes de la Iglesia). Se intentó reemplazar la religión por la veneración a la razón y la ciencia, promoviendo una sociedad materialista e inmanente.

 Si bien la Revolución Francesa terminó con el poder de la aristocracia, los excesos cometidos crearon una reacción pro monárquica, cuya expresión máxima fue el Congreso de Viena y el apoyo al absolutismo europeo, después de la derrota de Waterloo.

 La concepción de Estado concebido por Rousseau como un contrato, es contrario al concepto de sociabilidad altruista y terminó favoreciendo la aparición de un Estado que se convirtió en dueño del monopolio de la creación del derecho como instrumento de dominación, más cuando por muchos años no existió una auténtica democracia (que aún no existe en muchos países que así se autodenominan).

 La Revolución Francesa fue un extremo en la historia pendular de la humanidad, un experimento violento, costoso en vidas y medios, y hasta con una dosis importante de hipocresía. Con los años se tamizaron sus excesos, se rescataron sus aciertos y se hicieron factibles algunas ideas utópicas que siempre encierran estos movimientos. Se puso fin a una época y comienzo a otra, con las ventajas y desventajas que encierran todas las creaciones del hombre.

 ¿Fue necesaria tanta violencia, tanto exceso y furia?

 Probablemente, no, aunque la falta de creatividad y tolerancia del sistema monárquico haya asistido a favorecer a dicha violencia.

 Por eso es bueno tener presente a esta Revolución, no solo los 14 de julio, sino cada vez que una agrupación tiende a imponerse por la violencia.

 ¿Qué nos dejó a los argentinos? En esta revuelta popular muchos grupos insurgentes, subversivos y progresistas han encontrado inspiración y justificativos para sus actitudes violentas, que al final de cuentas poco agregaron al bienestar del tan mentado “pueblo” y sumergieron a la patria en rivalidades y odios que solo encienden debates, donde las ópticas son tan diversas que solo tienden a perpetuarse, como las discrepancias que existen por la Revolución Francesa.











✒ Omar López Mato* | Notiar | Domingo 15 de julio de 2018.
http://www.notiar.com.ar/index.php/k2-listing/86774-que-nos-dejo-la-revolucion-francesa


*Omar López Mato
Médico y escritor
Su último libro es FIERITA - Una historia de la marginalidad
omarlopezmato@gmail.com
www.facebook.com/olmoediciones
Gentileza de www.olmoediciones.com para
 

28.4.18

Roca no fue un genocida



 No sólo los malones afectaban a miles de pobladores sino que los aborígenes decían estar bajo la bandera de Chile.



 A principios de 1878 Roca recibió una carta del presidente: "Acabo de firmar el decreto nombrándolo Ministro de la Guerra (… ) Encontrará V.S. una herencia que le impone grandes deberes. Es el plan de fronteras que el Dr. Alsina deja casi realizado, respecto a esta providencia, y a que es hoy más que nunca necesario llevar sin interrupción hasta el último término".


 Adolfo Alsina -que ocupaba ese puesto- había muerto y la estrella de Julio Argentino comenzaba a brillar en el firmamento. Por entonces se encontraba en Mendoza e inmediatamente se trasladó hacia Buenos Aires. En el camino casi murió, debido a una grave intoxicación. Pero sobrevivió y siguió su marcha, como todos aquellos que tienen cita con la historia.

 En agosto de ese año se dirigió al Congreso de la Nación Argentina: "Hasta nuestro propio decoro como pueblo viril nos obliga a someter cuanto antes, por la razón o por la fuerza, a un puñado de salvajes que destruyen nuestra principal riqueza (… ) La importancia política de esta ocupación se halla al alcance de todo el mundo. No hay argentino que no comprenda que en estos momentos, agredidos por la presiones chilenas, debamos tomar posesión real y efectiva de la Patagonia".


 No sólo los malones afectaban a miles de pobladores sino que los aborígenes decían estar bajo la bandera de Chile, porque aquel gobierno los protegía y mandaba regalos, mientras el nuestro había dejado de hacerlo. Se plegaban así a los deseos del vecino país de avanzar por nuestro territorio.



 El Congreso nacional autorizó la campaña. Desde mayo hasta diciembre de 1878 se llevaron a cabo 23 expediciones, que arrojaron la suma de 3.668 prisioneros. 150 cautivos regresaron a su hogar.

 Al año siguiente, el ejército formó 5 divisiones distribuidas entre Buenos Aires y Mendoza. Las partidas contaban con médicos, ingenieros, sacerdotes y hasta las familias de muchos soldados. Parecían pueblos en éxodo. El 16 de abril Roca dejó la capital y se internó con sus hombres en el desierto, prontos a escribir un nuevo capítulo de nuestro pasado.


 Las tropas trajeron muerte y vida. Cautiverio para unos, libertad para otros.



 El historiador Isidoro Ruiz Moreno realiza una defensa del Ejército argentino, adjuntando documentación que descarta cualquier fin genocida. Señala la "falta de consistencia con que algunos escritores achacan a los jefes militares del Desierto el dar muerte sistemáticamente a los indios que combatían. Con tal desaprensión que revela falta de rigor científico -al no basarse en documentos fehacientes-, se procura desmerecer la acción heroica y positiva que significó concluir con un estado espantoso de la vida en la frontera, duplicando la extensión de nuestro país".

 El mismo Roca difundió una orden a los miembros del Ejército días antes de comenzar la campaña buscando evitar una matanza: "En esta campaña no se arma vuestro brazo para herir compatriotas y hermanos extraviados por las pasiones políticas, para esclavizar o arruinar pueblos, o conquistar territorios de Naciones vecinas. Se arma para algo más grande y noble: para combatir por la seguridad y el engrandecimiento de la Patria, por la vida y fortuna de millares de argentinos, y aún por la reducción de esos mismos salvajes que tantos años librados a sus propios instintos, han pesado como un flagelo en la riqueza y bienestar de la República".

 Pero los soldados estaban hartos de la vida en la frontera y odiaban profundamente a sus enemigos salvajes. Fue muy difícil que cumplieran la orden de no eliminar a quienes se rindieran.

El resto de la historia es bien conocida.
















✒ Luciana Sabina* @kalipolis | Los Andes | Sábado, 28 de abril de 2018.
https://losandes.com.ar/article/view?slug=roca-no-fue-un-genocida-por-luciana-sabina

* Autora de 'Héroes y Villanos' de Editorial Sudamericana - Columnista en Diario Los Andes - Historiadora

25.4.18

Polémica: una marca de cerveza puso en su etiqueta que las Malvinas son británicas




 Un usuario argentino subió la foto de la botella a Twitter y Heineken tomó una medida drástica.

 Un tuit logró que conocida marca de cerveza tenga que salir a disculparse por haber impreso una etiqueta que mostraba a las Islas Malvinas como si fueran británicas. Un consumidor lo notó y subió la foto de la Twitter. La polémica trascendió a las redes sociales.

 “Hola @Heineken_AR tengo un problemita con la H-41. Te lo muestro. Pusieron que las Malvinas son de uk... Usas levadura patagónica y haces eso pedazo de vigilante?”, escribió el usuario Iván Conurban Ninja

 El tuit comenzó a viralizarse el sábado. Tres días después, la cerveza contestó. “Hola, gracias por avisarnos. Este producto de edición limitada no se vende en Sudamérica y cuando el equipo de Heineken Argentina tuvo conocimiento pidió el cambio a nivel global. Todas las etiquetas implicadas de esta edición en el mundo cambiaran", tuiteó, desde la cuenta local.

 En diálogo con Clarín, Juan Pablo Barrale, de Heineken Argentina, aclaró que en realidad la foto viral "es de una de las variedades Heineken Wild Lager H71 (no H-41), que es elaborada con levadura patagónica argentina y posee el contorno de las Islas Malvinas, con el nombre de Falklands".

 A la vez, detalló las medidas que tomaron frente a la polémica: "Fueron dos acciones, ese mismo sábado: 1) solicitamos el cambio de etiquetas en todo el mundo, de manera que en breve este producto tendrá una nueva 2) Contestamos (vía Twitter, con el mensaje anterior replicado) a quienes se interesaron".

 La cerveza también afirma que la H71 "es una edición limitada que no se vende en Sudamérica (sí en Francia)" y que "en ningún lugar del mundo volverá a comercializarse con la misma etiqueta".

 Como remarcó el usuario que viralizó el tuit, en abril de 2017 Heineken firmó un convenio con el el Instituto Andino Patagónico de Tecnologías Biológicas y Geoambientales (IPATEC) y desde entonces trabaja e invierte con el CONICET para fomentar las investigaciones de diversas levaduras salvajes. Como la que descubrió el científico argentino Diego Libdkind y es utilizada en la H41 (otra variedad de Wild Lager), que remite en su nombre a la latitud de Patagonia y que ya está disponible en Italia y Holanda.

✒ Redacción | Clarín | Miércoles 25 de abril de 2018.

25.2.18

Nadie hizo más que Perón


Esta es la publicada en el Diario “La Nación”, Domingo 4 de marzo de 1973, Página 11. La tapa es de una edición de 24 páginas en folleto que se realizo en Febrero de 1973

Dedicado en especial a los jóvenes que no han vivido ni estudiado, la experiencia de esta década de infamia, cuyos hechos han sido ocultados o deformados por ideólogos interesados en el olvido o la desfiguración, que no son más que formas elementales del lavado de cerebro al que el totalitarismo trata siempre de someter a los hombres libres.

LO MORAL

a) La Patria

1.- Silenció el culto de todos los héroes y próceres.
2.- Reemplazó el Himno Nacional por la marcha partidaria y quiso hacer lo mismo con el escudo argentino.
3.- En idéntica sustitución, también suprimió las marchas patrióticas.
4.- Restó toda importancia a la celebración del 25 de Mayo y menospreció el 9 de Julio, convirtiéndolo en el “Día de la Independencia Económica”.
5.- Devolvió al Paraguay los trofeos de guerra tomados por la Argentina.
6.- Hizo quemar la Enseña Nacional.
7.- Impuso su nombre y el de su segunda esposa a provincias, partidos, ciudades, pueblos, barrios, calles, plazas, estaciones, buques, aviones, institutos, congresos, etc.
8.- El 16 de Junio de 1955 tembló y gimió en el tercer sótano del Ministerio de Guerra, después de haber hecho convocar a sus adictos a Plaza de Mayo para que lo defendieran.
9.- Producida la Revolución del 16 de septiembre de 1955 se refugió en una cañonera paraguaya, mientras lo esperaba reunido su consejo de ministros.
10.- Fue juzgado por un Tribunal Superior Militar que lo condenó con la pena máxima: falta gravísima, por la indignidad que con su inconducta puso de manifiesto, prohibiéndole el uso del título del grado y del uniforme. Firmaron el fallo cinco tenientes generales de la Nación, por unanimidad.
11.- En noviembre de 1972, pese a ser ciudadano argentino, volvió al país con pasaporte paraguayo. Y el 16.12.72 en Asunción, ratificó: “Mientras viva utilizaré el pasaporte paraguayo, que tuve el honor de recibir en 1955”.
12.- Afirmó a la prensa extranjera que el ejército del Paraguay era el más glorioso de América y renegando de la institución que le dio formación militar se jactó de ser general paraguayo (título protocolar y de intercambio entre mandatarios).

b) La Familia

13.- Obligó a usar en las escuelas primarias libros de lectura con su efigie y la de su segunda mujer en todas las páginas, acompañadas de textos donde se exaltaba a ambos como únicos “próceres”. Reemplazó por su nombre y el de ella las palabras “papá” y “mamá”
14.- Cuando murió su madre no concurrió al sepelio, enviando un telegrama y haciéndose representar por un edecán, mientras paseaba en yate por los riachos del Tigre.
15.- Creó el odio entre padres e hijos y hermanos, destruyendo a millares de familias argentinas. Fomentó la delación en todas sus formas y la recompensó.
16.- Antepuso la incondicionalidad partidaria a todo sentimiento y aún a la unión del hogar, al que dividió en “réprobos” y “elegidos”.
17.- Explotó a su propia mujer viva y después de muerta, sometiendo su cadáver embalsamado al grotesco cortejo de los serviles. Hasta ella, antes de morir, lo repudió. Dijo a un grupo de sindicalistas: “Cuídense de este miserable”.

c) La Religión
18.- Quiso entronizar en los altares su efigie y la de su mujer.
19.- Reemplazó el crucifijo por el retrato de ambos en hospitales, colegios, institutos, entidades, etc.
20.- Proclamó a su partido como “única religión nacional”.
21.- Sustituyó el Día de la Inmaculada Concepción por el “Día del Campeón” (Pascual Pérez)
22.- Decretó el 18 de octubre como “San Perón”.
23.- Hizo sancionar la Ley de la Prostitución.
24.- Persiguió, encarceló, vejó y/o expulsó a centenares de sacerdotes y obispos, entre otros: Monseñores De Andrea, Lafitte, Tato, Novoa, Dumphy, Jorba Farías, los curas de la Medalla Milagrosa, etc.
25.- Ordenó quemar y profanar, con apoyo policial, numerosos templos de la ciudad de Buenos Aires.
26.- En el mismo “operativo” quedó totalmente destruída la Curia Metropolitana.
27.- Fue excomulgado por el Papa.

d) La Verdad

28.- Aseguró haber obtenido la bomba atómica, gracias a las investigaciones de los científicos argentinos Ronald Richter y Otto Gamba, despilfarrando millones en autopublicidad y poniéndonos en ridículo ante el mundo.
29.- Dijo “He renunciado al honor más grande a que puede aspirar un militar: a ser general de la Nación, para seguir siendo siempre vuestro querido coronel Perón”.
30.- Dijo: “No tengo otra ambición que la de servir a los trabajadores, Por eso nunca seré Presidente”.
31.- Dijo: “Aunque me lo pidan a título de sacrificio personal, jamás aceptaré mi reelección”.
32.- Dijo: “Antes de adoptar semejante determinación me cortaría la mano derecha” y firmó la declaración de guerra contra el Eje cuando éste ya estaba derrotado.
33.- Cuando era presidente dijo: “Yo vivo modestamente con trescientos pesos mensuales”. Una vez que huyó, afirmó cínicamente que “podía pasar el resto de suvida comiendo billetes de mil todos los días”.

e) La Honestidad

34.- Fue procesado por haber cometido el delito de estupro contra una niña de 14 años.
35.- Hacía seleccionar por sus sicarios a sus futuras víctimas (generalmente de hogares muy humildes y en las escuelas) y les regalaba billeteras con dinero, bicicletas y motonetas con gorras “pochito”.
36.- Corrompió instituciones fundamentales de la República, comprando voluntades con órdenes para adquirir automotores “a precios de lista”. Sus favoritos recibieron centenares, y negociaron la mayor parte de ellas.
37.- Cubrió a su segunda mujer de joyas cuya valuación actual es de muchos miles de millones de pesos.
38.- No obstante su declamada pobreza colocó millones de dólares a interés en cuentas del exterior, particularmente en Suiza y los Estados Unidos.
39.- Desconfiando de los “cien años de cuerda” que se atribuía, abrió numerosas cuentas extranjeras a nombre de terceros. De la nada llegó así a figurar entre los diez hombres más ricos del mundo.
40.- Para satisfacer su propio ego obligó a deportistas, científicos, técnicos y artistas, a dedicarle públicamente sus triunfos. Los que no se sometieron tuvieron que retirarse o emigrar.
41.- Humilló a los hogares modestos en las fiestas de fin de año, haciéndoles llegar sidra y pan dulce comprados con los dineros del país, en paquetes que llevaban su retrato y el de su segunda esposa y una inscripción que decía: “Obsequio de Perón y Evita”.

LO POLÍTICO INSTITUCIONAL

f) La Ley


42.- Modificó arbitraria y fraudulentamente la Constitución Nacional para posibilitar su reelección.
43.- Ganó las elecciones haciendo fraude preelectoral, monopolizando para su partido todos los medios de comunicación, coaccionando y amenazando a través de sus personeros a todos los agentes públicos, modificando maliciosamente las inscripciones electorales, trasladando en trenes y camiones grandes cantidades de votantes de un lugar a otro de la República, etc.
44.- Hizo fraude durante y después del comicio. No depuró los padrones y empleó elementos pagados, haciéndolos votar varias veces con una misma libreta, o utilizando libretas de fallecidos; adulteró las cifras del escrutinio, etc.
45.- Implantó la afiliación obligatoria al “partido único”, como requisito indispensable para poder trabajar.
46.- Decretó el luto obligatorio por la muerte de su segunda esposa.
47.- Obligó a funcionarios, empleados y obreros a observar el “minuto de silencio” a las 20,25.
48.- Impuso la concurrencia forzosa a todos los actos partidarios.
49.- Rotuló a sus adversarios políticos como “la canalla opositora” y los encarceló, vejó y torturó.
50.- Intimidó a grandes sectores de la ciudadanía, quemando la Casa Radical, la Casa del Pueblo la sede del Partido Demócrata Nacional y el Jockey Club.
51.- En la quema de la Curia, de la Casa del Pueblo y otras instituciones, destruyó más de 200.000 libros e inutilizó importantísimas obras de arte, archivos históricos insustituibles, reliquias, trofeos patrióticos, etc.
52.- Ejerció la suma del poder público, aceptando las facultades extraordinarias que le concedieron sus obsecuentes legisladores. Violó así, junto con ellos, la Constitución Nacional, quedando todos sujetos “a la responsabilidad y pena de los infames traidores a la patria”, que establece el artículo 29 de aquella.
53.- Sometió absolutamente al Poder Judicial y a todos los fueros de Justicia. Llegó al extremo de decir: “El gobierno y el Estado me pertenecen a mí, como funcionario. Yo actúo sobre ellos, los gobierno, los manejo, los mando” (10-1-53).
54.- Decretó el “estado de guerra interno” permanente y utilizó a su arbitrio la Ley de Residencia.
55.- Aprovechó la obsecuencia legislativa y judicial, para obtener más de cien despachos diarios, favorables a sus propósitos e intereses personales. En un solo día se llegaron a presentar en el Congreso 383 proyectos de homenajes a él y a su segunda esposa, caso único en la historia del mundo.
56.- Antepuso su vanidad a la gloria del Padre de la Patria, y pretendió equipararse a él haciéndose proclamar oficialmente, por el Congreso, “Libertador de la República”.
57.- Proclamó a su programa partidario como “Doctrina Nacional” e hizo titular a su segunda mujer como “Jefa Espiritual de la Nación”.
58.- Cuando fue derrocado le estaban levantando un monumento, con fondos recaudados mediante descuentos obligatorios.
59.- En cuanto al monumento “al descamisado”, financiado del mismo modo, nunca se construyó y nadie sabe lo que se hizo del dinero “donado” para ese fin.

g) El Ejército

60.- Postergó o no permitió el ascenso de los jefes y oficiales que se habían manifestado abiertamente contrarios a su régimen.
61.- Dispuso antirreglamentariamente la participación de las Fuerzas Armadas en actos de carácter partidario, e inició el nefasto proceso de politización de las mismas.
62.- Trató de corromper la moral de los jefes, con órdenes de compra de automotores, misiones al exterior, y otorgándoles la”medalla militar peronista”.
63.- Sometió a las instituciones armadas, como a la civilidad a un régimen de delación y servilismo.
64.- Quiso reemplazar al ejército por bandas armadas (“milicias populares”).

h) La Libertad de Prensa

65.- En 1946 clausuró “La Vanguardia” (órgano oficial del Partido Socialista),
“Cascabel”, “Antinazi”, etc. Luego “La Nueva Provincia”, “El Intransigente”, etc. En 1950, La Comisión Visca” cerró en un solo día más de cien publicaciones. Posteriormente hizo tomar por asalto el diario “La Prensa”, del cual se apropió. En esa ocasión fue asesinado un obrero gráfico y el personal sufrió cárcel, vejámenes y torturas. Dado su discrecional manejo de las cuotas de papel, el diario “La Nación” -único no adicto- quedó reducido a dos hojas.

i) La Enseñanza

66.- Suprimió la autonomía universitaria y cerró todas las Academias Nacionales.
67.- Manejó las universidades desde la Casa de Gobierno.
68.- Reemplazó la materia “Instrucción Cívica” por una presunta “Cultura Ciudadana”, conformada a su programa partidario deformante.
69.- Persiguió y dejó cesantes a los profesores democráticos y encumbró a sus incondicionales. Destruyó virtualmente el magisterio y el profesorado masculinos, al mantener casi congelados los sueldos durante nueve años. Centenares de varones que alentaban esa vocación, tuvieron que abordar otras actividades para poder constituir o mantener una familia, quedando esa importante misión formativa, circunscripta a los docentes de sexo femenino.
70.- Reprimió a golpes a los estudiantes no adictos, por medio de sus “muchachos” casi siempre ex pugilistas a sueldo, encargados de la “persuasión”.
71.- Negó la historia, quiso cambiar el pasado y deformó la realidad espiritual y cultural de su tiempo, pretendiendo adecuarla a sus objetivos.
72.- Impuso la lectura obligatoria de “La Razón de mi Vida”, atribuido a su segunda esposa, pero escrito por un extranjero a sueldo.
73.- Convirtió en una sangrienta burla el precepto constitucional que consagra la libertad de enseñar y aprender. ("Alpargatas sí, libros no” “Haga Patria: mate un estudiante”, eran los estribillos habituales de las manifestaciones peronistas).

j) La Libertad Individual
74.- Instituyó la “medalla de la lealtad peronista” para premiar la delación y la obsecuencia.
75.- Creó los “Jefes de Manzana” del partido, “Gestapo” permanente de cada barrio en cada ciudad.
76.- Creó las “unidades básicas”, verdaderas células de penetración, acción psicológica, delación organizada, reparto de prebendas y en caso necesario, mecanismo de “persuasión” dentro de cada vecindario.
77.-Hizo que la simple denuncia de cualquiera, justificara la privación ilegal de la libertad o la expulsión del empleo.
78.- Suprimió el recurso de “habeas hábeas”, la tradicional garantía contra las restricciones ilegales de la libertad corporal de las personas.
79.- Recluyó a los presos políticos y gremiales junto con los delincuentes comunes y los asesinos.
80.- Sus sicarios asesinaron a obreros: Núñez, Aguirre, cañeros de Tucumán, ferroviarios, etc.; a profesionales: Ottolenghi, Ingalinella, etc.; a estudiantes: Salmún Feijoo, Bravo, Sulky, Valle, Astrada, Beltrán, etc.; a sacerdotes: Wagner, Martinez, etc.; entre muchos otros crímenes que sería largo enumerar.
81.- A los opositores encarcelados, los acusó de “comunistas”, calificación que hizo figurar en sus prontuarios.
82.- A mujeres no adictas, las hizo rapar para marcarlas y las sometió a malos tratos y vejaciones, fichándolas como prostitutas.
83.- Durante su régimen las torturas, los vejámenes y la picana eléctrica fueron métodos habituales de “persuasión” políticas.

k) Las Fuentes de Trabajo
84.- Con su política totalitaria desalentó el trabajo en el interior del país y provocó el éxodo rural a las ciudades.
85.- Proliferaron así centenares de “villas miseria”.
86.- Provocó la necesidad del doble empleo para poder sobrevivir.
87.- Sometió a los sindicatos en una central única y dictatorial que fue su “partido paralelo” y a la vez su “fuerza de choque”.
88.- Copió la “carta del lavoro” fascista, implantándola como régimen laboral argentino.
89.- Politizó los gremios al punto de que para poder trabajar, era imprescindible ser afiliado a su partido único y adicto incondicional de su régimen.
90.- Desposeyó a los sindicatos, utilizando sus fondos en su provecho personal y en el de sus allegados. Vació las cajas de jubilaciones, incautándose de sus reservas, que sustituyó por bonos incobrables.
91.- Inauguró la entrega obligatoria de sueldos y jornales. Inventó los descuentos por planilla y otras formas de despojo actualmente en vigor (como muchas otras implantas por él)

l) La Vivienda

92.- Convirtió en una realidad angustiante el problema de la vivienda para las clases más necesitadas y para la clase media, a la que intentó destruir.
93.- La inflación que él mismo causó, le obligó a congelar los alquileres mediante una ley totalitaria. Sabía que ese medio fraudulento era el único capaz de evitar que millares de familias cayesen en la indigencia, lo cual hubiera precipitado su caída.
94.- Benefició con edificaciones palaciegas a los miembros de su camarilla gobernante, a los jerarcas del partido y a los dirigentes de los sindicatos adictos.
95.- Su política en esta materia produjo una crisis habitacional sin precedentes en la historia del país.
96.- Infligió gravísimo daño a la industria de la construcción, provocando una contracción económica que afectó a centenares de gremios afines y aumentó la desocupación.
97.- Despojó de su legítima renta a los pequeños propietarios, que vieron así diluirse el fruto de sus ahorros, al legalizarse el atropello al libre usufructo de la propiedad privada.
98.- En materia de vivienda produjo al país un atraso de más de medio siglo.

m) Los Servicios Públicos

99.- Con el pretexto de nacionalizarlos, compró y destruyó a los ferrocarriles, transformando sus servicios en una verdadera vergüenza nacional.
100.- Anuló la eficiencia de todos los servicios públicos: Teléfonos, Correos, Telégrafos, Energía Eléctrica, Obras Sanitarias, Asistencia Hospitalaria, Transportes, etc. Demoró en diez años la introducción de la televisión con respecto a otros países sudamericanos. Cuando se inició, sólo se permitieron televisores en las unidades básicas.
101.- Implantó restricciones al consumo de energía eléctrica familiar, comercial e industrial, como consecuencia del déficit energético que provocó. Las familias tuvieron que usar elevadores de tensión, los comercios fueron racionados en la iluminación de vidrieras (días para las numeraciones pares y días para las impares) y la industria obligada a funcionar con limitaciones y alteraciones horarias. También fue responsable de la implantación de los “limitadores” de consumo de nafta, consecuencia de su funesta política petrolera. Redujo a YPF a una organización burocrática atrasada e inoperante. El sindicato mandaba según sus caprichos, per encima del directorio aterrorizado. En 1955 la perforadora más nueva tenía 16 años de edad y las había de 25. Cuando cayó su régimen pudo impulsarse la acción, construyéndose entre numerosas obras, los grandes oleoductos de Campo Durán.
102.- Mantuvo virtualmente paralizada la red vial nacional. En nueve años, no llegó a terminar ni 5000 kilómetros de caminos. Después de su derrocamiento se hicieron más de 18.000 y de mejor calidad.
103.- Durante su gobierno, apenas logró un incremento de consumo de cemento por habitante, de 43 kgs. Inmediatamente después se produjo una expansión “per cápita” de 102 kgs.
104.- En energía eléctrica totalizó 2695 millones de capacidad de Kw/h contra 10915 millones de Kw/h, después de su deposición.

LO ECONOMICO

n) La Inflación

105.- Desató una espiral inflacionaria en progresión geométrica, cuyas consecuencias dificultan, aún hoy, la recuperación nacional. Manejó discrecionalmente y con criterio político, la cartera crediticia, aniquiló el ahorro y ahuyentó la inversión. El hecho de que actualmente se mantenga la misma política es –naturalmente- imperdonable; pero no exculpa en modo alguno al tirano que la implantó.
106.- Convirtió el Banco Central en una simple oficina de la Casa de Gobierno, produciendo sucesivas emisiones incontroladas hasta empapelar al país. (¿Para qué quieren dólares?” - ¿Alguno de ustedes ha visto un dólar? – “Los dólares no se comen” – decía después de haber dilapidado una enorme reserva de divisas en numerosas extravagancias demagógicas.)
107.- En nueve años mantuvo virtualmente paralizado el ingreso promedio de los argentinos, que sólo creció en un 11% contra un 43% después de su derrocamiento. Esta fue otra gravísima consecuencia de su política económica colectivizante e inflacionista.

ñ) El Dirigismo

108.- Firmó un contrato leonino con la “California” y otros grupos -que se jactaba de combatir- en detrimento de la soberanía nacional y de nuestra economía. Con su política confiscatoria llevó la crisis al campo fomentando un inexistente antagonismo agro-industrial. Expropió establecimiento agrarios en plena producción, para provecho de la camarilla gobernante. Tampoco escaparon a esta política las empresas industriales no adictas. Fue responsable de la merma de nuestras cosechas de trigo, maíz, avena, cebada, lino, etc. Dilapidó las reservas de nuestro stock ganadero sacrificando vientres y animales jóvenes y después de ocupar el primer lugar en el mundo, fuimos desplazados por nuestros antiguos compradores, llegando a tener que importar semilla de lino. De primera potencia triguera mundial, descendimos a comer pan de harina oscura.
109.- Redujo a cero nuestro parque automotor. Estableció un régimen de privilegio a través del sistema de “órdenes de compra” que manejó discrecionalmente, repartiendo más órdenes que el stock real de unidades.
110.- Creó un monstruo económico: el IAPI, corrupto organismo que negociaba irregularmente y con sentido político. Todos los artículos de primera necesidad para el consumo familiar tuvieron que ser racionados. Los argentinos conocimos las “colas” para el kerosene, el vino, la leche, el azúcar, la papa, los huevos, etc. Para recuperar el stock ganadero que había destruido, quiso obligarnos a comer pescado y gastó millones para hacer propaganda exaltando los beneficios de esta alimentación. Inventó la ropa, los enseres y hasta la comida “flor de ceibo”.

o) La Deuda y las Reservas

111.- Dijo que cuando llegó al poder había una deuda externa de 3.500 millones de dólares, por la que pagaban 500 millones anuales de amortización e intereses. Según las Memorias del Banco Central, a principios de 1946 la deuda pública no superaba los 250millones de dólares y sus servicios no alcanzaban a 40 millones de dólares.
112.- Afirmó que en 1946 no teníamos reservas financieras y que antes de su derrocamiento, teníamos 1600 millones “cash” en la mano. Según las Memorias del Banco Central, a fines de 1945 teníamos 1200 millones de dólares en oro y 460 millones de dólares en divisas; y a fines de 1955 solo nos quedaban 370 millones de dólares en oro y 110 millones en divisas.
113.- Subió al gobierno con una deuda pública de 230 millones de dólares y su administración la elevó a 757 millones de dólares, o sea más del triple en solo nueve años. Las Memorias del Banco Central que se han citado pertenecen al ejercicio de su colaborador Miguel Miranda (negociado de la hojalata). (En cuanto a los saldos que registran sus cuentas particulares en los bancos de Suiza y de otros países, nadie los conoce, pero, por algo es el séptimo entre los más grandes inversores de la Bolsa de Nueva York).
A propósito de estos bienes, es interesante recordar cómo se desveló por ellos cuando se produjo la Revolución Libertadora. Al día siguiente del estallido, el 17-9-55, ya con la mente puesta en la fuga y mientras otros ciudadanos se jugaban la vida en la lucha que se desarrollaba, él se tomó el tiempo necesario para extender ante escribano público un amplio poder para la administración de su cuantiosa fortuna. Antes del 3-12-49, había manifestado –en solemne declaración pública de bienes- que sólo poseía sus efectos personales, un automóvil Packard y una quinta hipotecada en San Vicente.

LO INTERNACIONAL

p) La Posición Argentina


114.- Logró el unánime desprestigio de nuestro país ante el mundo civilizado. Inventó los convenio bilaterales de trueque para disimular el descalabro de nuestro comercio exterior.
115.- Hizo perder a la Argentina su privilegiada posición de liderazgo espiritual y material en Latinoamérica.
116.- Perturbó de continuo las tradicionales relaciones de amistad con casi todos los países del Continente, llegando inclusive a crear conflictos inexistentes para distraer la atención de la ciudadanía con respecto a la dramática gravedad de la situación interna en todos los órdenes.
117.- Convirtió a las embajadas extranjeras en el refugio obligado de sus compatriotas perseguidos que debieron asilarse huyendo de su régimen de terror.
118.- Cuando él huyó, comprometió gravemente a las naciones que lo cobijaron, conspirando sin cesar e incitando siempre a sus adictos a la violencia y a la comisión de todo tipo de crímenes, mientras él se mantenía prófugo.
119.- Sólo cultivó estrechos vínculos de amistad con los estados totalitarios.

q) Agravios Internacionales
120.- Consecuente con sus simpatías fascistas, facilitó el ingreso al país de criminales de guerra. A este respecto se ha difundido últimamente que negoció la protección que les brindaba por dólares (Eichman, entre otros muchos jerarcas nazis y más 7000 pasaportes en blanco, que cobró a pesos de oro).
121.- Movido por su odio al Uruguay, tomó represalias contra el gobierno del país hermano, paralizando el funcionamiento de la Comisión Técnica Mixta Argentino Uruguaya del Salto Grande, y demoró así irracionalmente la construcción de esa necesaria represa.
122.- Pidió auxilio a una flota extranjera cuando consideró inminente el bloqueo naval de nuestra marina de guerra.

LAS BASES IDEOLÓGICAS

123.- Fue el gran impulsor del nazi-fascismo, sistema del cual hizo la pública apología. Dijo: “Elegí cumplir mi misión desde Italia porque allí se estaba produciendo un ensayo de nuevo socialismo”. Consecuente con su vocación antidemocrática, cuando “el Eje” fue derrotado, puso sus miras en el totalitarismo rojo.
124.- Dijo: “La Revolución Rusa Había ejercido una notable influencia, pero llegó a Occidente transformada”.
125.- Dijo: “El peronismo, en la medida en que puso el acento sobre lo social, también vivió el influjo de la Revolución Rusa”.
126.- Dijo: “En 1946 restablecí las relaciones con la URSS”.
127.- Dijo: “Los generales cavernícolas que pretendían convertir al Ejército en una guardia pretoriana, me acusaron de comunista”.
128.- Dijo refiriéndose a Vittorio Codovilla y a sus “rojos”: “Nosotros nos sentíamos mil veces más comunistas que ellos”.
129.- Dijo: “Yo aspiraba a ser el Lenín de esta Revolución”.
130.- Dijo: “Si Rusia me hubiera dado pleno apoyo, yo hubiera sido el primer Fidel Castro de América”.
131.- Hizo reiteradamente la apología de Mao Tse Tung. “Si yo fuera chino sería maoísta”. Ratificó el 11-2-73.

SU PACIFICACIÓN

132.- “El día que se lancen a colgar, yo estaré del lado de los que cuelgan”. (2-8-46)
133.- “Entregaré unos metros de piola a cada descamisado y veremos quién cuelga a quién”. (13-8-46)
134.- “A mí me van a matar peleando”. (13-8-46)
135.- “Con un fusil o con un cuchillo, a matar al que se encuentre”. (24-6-47).
136.- “Esa paz tengo que imponerla yo por la fuerza”. (23-8-47).
137.- “Levantaremos horcas en todo el país para colgar a los opositores”. (8-9-47).
138.- “Vamos a salir a la calle de una sola vez para que no vuelvan nunca más ni los hijos de ellos”. (8-6-51).
139.- “Distribuiremos alambre de enfardar para colgar a nuestros enemigos”. (31-8-51).
140.- “Para el caso de un atentado al presidente de la Nación... hay que contestar con miles de atentados”. (Plan Político Año 1952).
141.- “Objetivo: Lista de dirigentes opositores; lista de instituciones reconocidas como desafectas al gobierno; lista de opositores o de casas comerciales dirigidas o ligadas a los opositores; lista de representaciones cuyos gobiernos realizan campañas opositoras al nuestro. Personal: Serán empleados grupos previamente instruidos y seleccionados de las organizaciones dependientes de la CGT y del Partido Peronista Masculino. Misión: Atentados personales; voladuras; incendios”. (En el mismo documento).
142.- “Se lo deja cesante y se lo exonera... por la simple causa de ser un hombre que no comparte las ideas del gobierno; eso es suficiente” (3ª. Conferencia de Gobernadores, pág. 177).
143.- “Vamos a tener que volver a la época de andar con alambre de fardo en el bolsillo”. (16-4-53, horas antes del incendio de la Casa del Pueblo, la Casa Radical, la sede del Partido Demócrata Nacional y el Jockey Club).
144.- “Leña... leña... Eso de la leña que ustedes aconsejan, ¿por qué no empiezan ustedes a darla?” (El mismo día).
145.- “Hay que buscar a esos agentes y donde se encuentren colgarlos de un árbol”. (El mismo día).
146.- “Compañeros: cuando haya que quemar, voy a salir yo a la cabeza de ustedes a quemar. Pero entonces, si eso fuera necesario, la historia recordaría la más grande hoguera que haya encendido la humanidad hasta nuestros días. Los que creen que nos cansaremos se equivocan. Nosotros tenemos cuerda para 100 años”. (7-5-53).
147.- “A unos se los conduce con la persuasión y el ejemplo; a otros con la policía”. (15-5-53).
148.- “Aquel que en cualquier lugar intente alterar el orden contra las autoridades... puede ser muerto por cualquier argentino. Esta conducta que ha de seguir todo peronista no solamente va dirigida contra los que ejecutan, sino también contra los que conspiren o inciten”. (31-8-55).
149.- “Y cuando uno de los nuestros caiga, caerán cinco de ellos”. (31-8-55).
150.- “Que sepan que esta lucha que iniciamos no ha de terminar hasta que no los hayamos aniquilado y aplastado”. (31-8-55).
151.- “Nuestra nación necesita paz y tranquilidad... y eso lo hemos de conseguir persuadiendo, y si no a palos”. (31-8-55)
152.- “Veremos si con esta demostración nuestros adversarios y nuestros enemigos comprenden. Si no lo hacen, ¡pobres de ellos!. (31-8-55).
153.- “Yo pido al pueblo que sea él también un custodio del orden. Si cree que lo puede hacer, que tome las medidas más violentas contra los alteradores del orden”. (31-8-55).
154.- “¡Al enemigo, ni justicia!”. (Memorando reservado “para el doctor Subiza”. De su puño y letra, con triple subrayado). (Esta misma frase la vuelve a repetir desde el exterior en junio de 1972, y se difundió por televisión a todo el país los días 21 y 22-6-72).
155.- “¡Ah... si yo hubiese previsto lo que iba a pasar... entonces sí: hubiera fusilado al medio millón, o a un millón, si era necesario. Tal vez ahora eso se produzca”. (9-5-70).
156.- “Si yo tuviera 50 años menos, no sería incomprensible que anduviera ahora, colocando bombas o tomando la justicia por mi propia mano”. (30-12-72).
157.- “Los militares son todos unas bestias”. (5-2-73).


Esta lista que no registra ni aproximadamente todas las imputaciones posibles, buena parte afecta principios éticos fundamentales. Bastaría una sola de ellas para marcar a fuego al déspota. ¿Qué decir de más de un centenar de hechos infamantes?.

El régimen peronista fue una corrupta tiranía y, como tal, intrínsecamente perverso. Aunque hubiera hecho “cosas buenas” en lo administrativo, ello no lo relevaría de la infamia. Pero en este caso, aún lo administrativo fue absolutamente deficiente y el régimen significó la ruina del país en todos sus aspectos.

Esto es historia y hay que recordarlo permanentemente para que se aprenda la lección. ¿O es que hay que estudiar a griegos y romanos e ignorar lo que pasó en el país hace dos décadas?

Y en cuanto a perdonar: ¿Se han rectificado acaso los culpables?

CIUDADANO:

Cuando haya leído esta solicitada facilítesela a un amigo, para que la conozca.

Recuerde que, según el sabio consejo de Bartolomé Mitre, “el odio contra las tiranías es una fuerza moral que no debe ser extinguida en los pueblos”.

✒ La Segunda Tiranía 
https://lasegundatirania.blogspot.com.ar/2010/01/nadie-hizo-mas-que-peron-solicitada-del.html

"Combatimos desde Puerto Argentino" Conferencia de Owen Crippa VGM


"Combatimos desde Puerto Argentino"
Conferencia de Owen Crippa
Piloto Naval en la Guerra de Malvinas
Cruz de la Nación Argentina al heroico valor en combate
viernes 23/03, 19 hs
Amugenal, salón de conferencias 1º piso 
San Lorenzo 635 
Corrientes, Argentina